jueves, 29 de diciembre de 2011

FIFTY FIFTY INVERNAL



En invierno se llora mucho, porque los árboles no tienen hojitas que nos abriguen, porque las bicicletas pasan de largo y uno se mira los cordones de los zapatos o coge un taxi y se pregunta ¿quién duerme en la ciudad tan a oscuras?

Parece como si hasta los gatos se quedaran quietos, sin saber muy bien qué hacer, mirando a la luna que cruje de escarcha … Tan blanca como las sábanas del telón del decorado e incluso los fantasmas están cansados. Si sus cadenas no pesaran tanto, saldrían, sin más, volando.

Hagamos ya una manifestación contra el invierno: para que estallen las yemas de los arbolitos, para que los gatos corran por los tejados maullando en celo, para que no usemos más zapatos … Para que los crêpes de chocolate y nata nos visiten todos los lunes (y los martes).

También en: El Funambulista

viernes, 20 de mayo de 2011

SIN TÍTULO, SIN COPYRIGHT

Imposibilidad de permanecer en el límite.

Adolescentes que se pintan
las uñas a escondidas
con el alma vendida ya;
jugamos una obra de teatro
de obsoleta dramaturgia
trasnochada fantasmagoría de otro tiempo

nos ofrecen papelinas desde el púlpito ...
... tenemos que cerrar los ojos
tenemos que

Imposibilidad de quedarnos en el límite.

Ahora volvemos a la plaza
ahora caminamos la calle
ahora llenamos la plaza.

Necesidad de romper el límite
necesidad de ser
blanda pequeña gota de agua
gota amable
gota
ahora anegamos la bodega del límite
(la panza de la bestia)
y no vemos cauce que nos contenga
gota a gota
soy río.

http://aireelfunambulista.blogspot.com/2011/05/democracia-real-ya.html